La falta de lluvias desde la primavera ha obligado a activar la prealerta por sequía en la cabecera de la cuenca del Segura justo en el momento, además, en el que el Ministerio para la Transición Ecológica ultima la revisión del plan de cuenca del Tajo con el aumento del caudal ecológico a 8 metros cúbicos por segundo, lo que recortará hasta en 130 hm3 al año el trasvase (sumada la merma de agua por la modificación de las normas de explotación). Una medida que llegará, además, en el inicio del nuevo año hidrológico el próximo 1 de octubre.